Algunas tardes en mi oficina, cuando así se puede, quienes
compartimos espacio dedicamos parte de nuestro tiempo al debate de hechos y
situaciones de una amplia gama de temas. En pocas palabras, nos dedicamos a
arreglar el mundo.
Recientemente, el tópico fue la gestión del Presidente Peña
Nieto y la comparación con las administraciones anteriores. Discusión álgida,
polémica, sin duda, con muchas opiniones, como las hay en todo el país.
La mayoría de las opiniones versaron en el sentido de que la
actual administración es la peor. Muchos mexicanos así lo consideran, como reflejó
un estudio estadístico publicado en el periódico Reforma hace unos días, y como
lo vemos a cada minuto en Facebook y Twitter.
Mi postura no fue de contradecir esa afirmación, pero no
coincido del todo.
Creo que en México, sistemáticamente se critica a quien se
encuentre en el poder, y una vez terminado su periodo –en la mayoría de los
casos- se olvida y hasta se añora.
Ejemplifico en lo inmediato anterior. Durante el gobierno de
Felipe Calderón, el reclamo popular, comprensible, se centraba en la guerra contra el narcotráfico
y sus consecuencias, que sumaban miles de muertos, niños huérfanos y familias
destruidas. Miles de litros en tinta se gastaron en narrar historias de dolor y
terror.
Más hacia atrás, estuvo Vicente Fox. La opinión pública fue
brutal contra él, a quien lo tildaban de –lo más bajito- tonto, torpe y
mandilón. Las crisis de “¿y yo por qué?”, la ofensa a la comunidad
afroamericana, la de “comes y te vas”, entre otras, lo sentenciaron. Recuerdo a
un caricaturista que lo dibujaba como Goofy.
Ernesto Zedillo empezó su periodo marcado por la crisis
económica, por el levantamiento del movimiento zapatista en Chiapas y más
adelante por la matanza de Acteal. Además que cargaba con el peso del régimen
autoritario del priísmo, tuvo una actuación gris, que conjugada con los
problemas ya citados, dieron paso a la alternancia.
Sin embargo, considero que hay elementos importantes para
destacar de cada administración.
Con Zedillo se concretaron procesos democráticos que México pedía
y necesitaba. En 1996 se aprobó una Reforma Electoral sustancial, cuyo punto
más destacable fue el retiro del control al Gobierno para organizar elecciones.
La legislatura de 1997 fue la primera en que el partido en la Presidencia no
tenía mayoría absoluta en el Congreso de la Unión. Y, claro, después de Ernesto
Zedillo llegó el primer mandatario de otro partido.
La gestión de Vicente Fox estuvo caracterizada por una economía
sólida y con buenos números y –sobretodo- la inflación se mantuvo bajo control,
que es lo que más pega en el ánimo de la gente (como dijera Bill Clinton, “es
la economía, estúpido”). Además se avanzó enormemente en transparencia.
De Felipe Calderón podemos decir que tuvo buenos resultados
macroeconómicos, inversión en obra y desarrollo social y fortalecimiento de los
derechos humanos.
Sobre la actual administración de Enrique Peña Nieto destaco
las Reformas Estructurales, que si bien han sido un eje para atacarlo, creo que
son benéficas a largo plazo y sus resultados no se verán en lo inmediato. Pero
de entrada han sacudido el sistema político y económico del país, lo que sin
duda acarrea críticas y son terreno fértil para los ataques.
A Peña le tocó el clímax de las redes sociales como elemento
de crítica ciudadana, lo que ha sido bien aprovechado para señalar los errores,
y considero que aún no existe la fórmula para contrarrestar debidamente ese
fenómeno.
Hay asignaturas pendientes y acciones por aclarar. Las
cuestiones de inseguridad, derechos humanos, pobre economía interna, sin duda.
A la distancia, hay voces que enaltecen las gestiones de Fox
y Calderón, que al parecer olvidan lo que en su momento se les criticaba.
Desconozco cómo le irá a EPN a partir del 1 de diciembre de 2018. Para eso,
solo falta esperar.
Como siempre, su opinión ayudará a ampliar el debate.
Siéntanse libres de verter sus opiniones debajo de estas líneas.
CODA
En 14 estados de México se llevan a
cabo procesos electorales. En doce de ellos se elegirá Gobernador. En Baja
California se elegirán Presidentes Municipales y Diputados locales. En la Ciudad de México se elegirá a quienes integrarán la Asamblea Constituyente para la redacción de la nueva Constitución de la ciudad.
De eso hablaremos después de la justa electoral del 5 de junio. Mientras, les
comparto el canal de YouTube de Focus Electoral, donde podrán ver y analizar
algunos spots de los distintos candidatos: http://bit.ly/1X4VM8j
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