Nunca como hoy, la figura del Presidente de la República ha
estado tan fustigada por la opinión pública, además de gran parte de la opinión
publicada en medios de comunicación.
Yerro tras yerro han sido material inflamable para que,
generalizadamente, la imagen de Enrique Peña Nieto se ve atacada constantemente.
No ha faltado, desde hace dos años, elementos para la crítica encarnecida,
desde los más profundos hasta los más débiles. Entre estos, están los que son falsos;
recordando lo aprendido del periodista sonorense Hilario Olea, “si es posible
es probable, y si es probable es creíble”.
Recientemente, escuché que en la comunicación política no
existe la verdad absoluta, existen percepciones que el público convierte en
verdad.
Y bajo esa premisa, cualquier acción de Peña Nieto es tomada
por la oposición para destacarle el lado negativo o adjudicarle uno. Conscientes
de que hay un público enardecido y ansioso del nuevo error del Presidente, esa
oposición replica el mensaje, que se expande con fuerza viral. Y así, se convierte
en verdad.
Captura de pantalla de uno de los videos editados
Como ejemplo, en la ceremonia del Grito de Independencia,
que Enrique Peña Nieto encabezó desde el balcón de Palacio Nacional. Vi la
transmisión en vivo a través de la televisión. Días después, me encuentro en
Facebook una video de la misma transmisión (mismas imágenes, mismo sonido),
pero con el agregado de unas voces que repudian al Presidente, añadidas en
edición, evidentemente.
Otro video, tomado desde la plancha del Zócalo –frente al
Palacio- muestra a un grupo de personas efectivamente maldiciendo al
Presidente, pero que claramente no son la totalidad de las personas asistentes –de
los cuales se dice que fueron “acarreados”-. Tiene más de cuatro millones de
reproducciones en redes sociales.
Hace algunas semanas circuló una imagen de una caja de
libros de texto gratuitos, en la que se apreciaba una etiqueta que mostraba un precio
de venta por cada ejemplar. Las redes reventaron: “¿cómo van a vender un libro que
históricamente ha sido sin costo, cuya gratuidad está en la ley?”. Naturalmente,
esa imagen fue editada, difundida y presentada como cierta.
Captura de pantalla de un video que "informa" que hubo un intento de
atentado en la Ceremonia de Independencia
Como estos casos hay decenas, que son tomados como legítimos
y provocan urticaria en los mexicanos, lo que es comprensible.
Tenemos el gran reto
de convertirnos en un pueblo con capacidad de identificar lo real de lo
montado, lo objetivo de lo alentado, y si vamos a criticar a las instituciones
(lo cual me parece un ejercicio totalmente válido y sano), lo hagamos con elementos
verídicos, que vaya que los hay.
No cabe duda que de esta inestabilidad presidencial hay
beneficiados, y son quienes la alientan, lo cual es legítimo, pues es el juego
de la política y la democracia, y nada les caería mejor que la renuncia del Presidente.
Nada más hay que estar conscientes de las repercusiones.
CODA
Con mucho gusto, les comparto que en días pasados inicie la
Maestría en Comunicación Estratégica para Gobiernos e Instituciones, en el
Instituto Ortega-Vasconcelos de México, que sigue el pensamiento de
José Ortega y Gasset y de José Vasconcelos.
El posgrado es impartido por grandes académicos y cuenta con
un plan de estudios sumamente relevante. Si desean conocer más de esta
institución, pueden hacerlo en su página web: http://www.ortegavasconcelos.mx/
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